La Anunciación a la Santísima Virgen, el comienzo de nuestra redención

¿Por qué la Anunciación del Arcángel San Gabriel a la Santísima Virgen es el comienzo de nuestra redención?

De paso, ¿sabes tú cuál es la profecía en torno a la Anunciación que aún no se ha cumplido?

En la homilía que publicamos más adelante, Monseñor Fernando Altamira nos recuerda que con la Anunciación a la Santísima Virgen y el Sí que ella dio, se produce la Encarnación del Hijo de Dios; Dios se hace carne en Nuestro Señor Jesucristo y empieza así la obra de la Redención.

En cuanto a la profecía pendiente de cumplimiento, el Ángel le anuncia a la Santísima Virgen que el Reinado de Nuestro Señor Jesucristo será sobre la Casa de David y Su Reino no tendrá fin. En otras palabras, el Reinado de Nuestro Señor será sobre el pueblo judío (cuando el pueblo judío se convierta a la verdadera religión católica) y será eterno.

Por otra parte, Monseñor aprovecha para recalcar que la Santísima Virgen es el símbolo de la Humildad y de la Pureza.

En relación con la virtud de la Pureza, el Papa san Gregorio Magno, basado en la Sagrada Escritura, nos explica que no sirve tener la virtud de la Castidad (la cual sería una manifestación de nuestra Fe) si dicha virtud no va acompañada de las obras de la Fe (es decir, de obras buenas que sean acordes con nuestra religión católica). De la misma manera, tampoco sirve hacer las obras de la Fe sin tener castidad.

Escuchemos a continuación a Monseñor Altamira, para que nos amplíe estos y otros temas asociados con el grandioso evento de la Anunciación a la Santísima Virgen, que marca el comienzo de nuestra redención.

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